Morihei Ueshiba, también conocido como O-Sensei, fue el fundador del aikido y nació el 14 de diciembre de 1883 en la aldea de Tanabe, en la prefectura de Wakayama, Japón. Era el cuarto de cinco hijos de una familia de agricultores.
Desde temprana edad, Ueshiba demostró un gran interés en las artes marciales y comenzó a practicar judo y kendo cuando era niño.
A mediados de los años 20, Ueshiba se trasladó a la ciudad de Ayabe y comenzó a estudiar bajo el famoso maestro de artes marciales Takeda Sokaku. Takeda era un experto en el sistema de lucha llamado Daito-ryu Aiki-jujutsu, y
Ueshiba se convirtió en uno de sus discípulos más destacados. Durante este tiempo, Ueshiba también comenzó a practicar otras artes marciales, como el jujutsu y el sumo, y a estudiar diversas filosofías y religiones.
En 1925, Ueshiba estableció su propio dojo (estudio de artes marciales) en Tokio y comenzó a enseñar lo que él llamaba “aikido”, una combinación de las técnicas de Daito-ryu Aiki-jujutsu con sus propias ideas y enfoques.
El aikido se basa en el uso del movimiento y la energía del oponente para neutralizar un ataque, y se enfoca en el desarrollo de la paz y la armonía a través de la práctica del arte marcial.
A lo largo de su vida, Ueshiba viajó por todo Japón y el mundo enseñando y promoviendo el aikido.
También escribió varios libros sobre el arte y se convirtió en una figura respetada y admirada tanto dentro como fuera del mundo de las artes marciales.
O’Sensei Morihei Ueshiba falleció el 26 de abril de 1969, pero su legado en el aikido y en el mundo de las artes marciales sigue vivo hasta el día de hoy.
Su legado, que ha inspirado a millones de personas en todo el mundo a practicar el aikido y a buscar la paz y la armonía en sus vidas, se enfoca en la no violencia y la resolución pacífica de conflictos es especialmente relevante en un mundo cada vez más dividido y violento.
El aikido sigue siendo una de las artes marciales más populares y respetadas del mundo, y la influencia de Ueshiba y su visión del arte marcial sigue siendo sentida en todo el mundo.
